Madrid Arena:Tragedia y aberración

12 Noviembre 2012, 20:18pm

Publicado por HartoDePolíticos

Llevo dos semanas reflexionando sobre la tragedia del Madrid Arena, la muerte de cuatro chicas adolescentes aplastadas por una masa humana que se movía en avalancha huyendo no se sabe de qué.

Este es uno de esos acontecimientos que uno,conocedor de cómo se mueve nuestra juventud desde hace años,venía temiéndose y alertando sobre sus riesgos, en ocasiones calificado de alarmista o negativo, cuando no de carca. Lo cierto es que en este caso la alarma en torno a la "macrofiesta" ha saltado sólo porque ha habido víctimas mortales,pues en esta sociedad hipócrita todo es saludable y positivo si quienes lo hacen son jóvenes,incluídos botellones o lo que sea.Pero se hacen macrofiestas y se corren grandes riesgos en ellas desde hace mucho tiempo.En estas celebraciones circulan,además de ingentes cantidades de jóvenes (casi siempre infringiendo la normativa sobre máxima capacidad del espacio), ingentes cantidades de alcohol, drogas (preferiblemente de síntesis, éxtasis, cocaína o hachis,en consumos únicos o asociados, voluntarios o involuntarios); aderezado todo ello por ingentes dosis de vatios pseudomusicales que administran las auténticas estrellas: los DJs (Steve Aoki era el Dios del Madrid Arena en Halloween).La mezcla de ingredientes no es un azar,sino que todo está meticulosamente calculado para garantizar el éxito, es decir el negocio.Todo por la pasta.

Uno puede preguntarse muchas cosas en su reflexión.En el caso concreto de esta fiesta de Halloween ...¿Qué diablos tendremos nosotros que celebrar de Halloween si en España de siempre la tradición era muy distinta?. ¿Por qué hemos asimilado hasta el último detalle tradiciones de calabazas,muertos,zombies, y festividades tenebrosas el 30 de Octubre?.Pero supongo que son preguntas demasiado "conservadoras",carcas o como se quiera, y por ello ahí quedan tan sólo esbozadas.

Otras preguntas sí son de elemental sentido común. Como profesional, expreso mi inquietud sobre la salud de una juventud que disfruta en ambientes en los que la incomunicación es absoluta (imposible cualquier diálogo con ese ruido) ,el contacto con el prójimo similar al del metro en hora punta, la necesidad del consumo de "lo que sea" imprescindible para el disfrute ,y el punto de conexión entre todos es el movimiento-danza (lo único saludable) y,por supuesto, la veneración por el ídolo, el DJ Fulanito.

Como ciudadano de a pie mis preguntas son mucho más serias y preocupantes todavía,aunque por desgracia ya las tengo respondidas de antemano : Las macrofiestas son negocios (en mayúsculas) que manejan una serie de mafiosos, a los que importa un pimiento la seguridad de los participantes. El tal Miguel Angel Flores estaba encausado ya previamente pero seguía a lo suyo, en esta España nuestra de la impunidad para con los cabroncetes. Se habían vendido (y regalado,y falsificado) 22000 entradas para un máximo de 10000 personas, el recinto carecía de la licencia adecuada; se había hecho la vista gorda con los DNI y las edades....y un largo etcétera que hace pensar que en este asunto estaban compinchados los habituales,administración incluída... Todo por la pasta es el lema que han mamado muchas generaciones de españoles y mueve éstos y otros negocios.

Las comparecencias de políticos después de conocerse las primeras muertes añaden un aspecto de surrealismo siniestro al suceso, con el vicealcalde diciendo que todo estaba en orden, la alcaldesa asegurando que "no habrá más macrofiestas",contradicciones por doquier y entre tanto ,supongo, Flores tan pancho.

Yo me pregunto para qué coño el megalómano despilafarrador Gallardón hizo edificar el Madrid Arena. En sus dos expectativas frustradas de olimpiada hubiera servido,pero...no ha sido el caso.Mientras tanto, se amortiza haciendo la vista gorda ante las infracciones. De momento ya ha habido muertos, pero tengo la certeza de que seguirá habiendo macrofiestas, a cual más masiva y exitosa.

Mis condolencias a las familias de las fallecidas. Y un consejo a otras familias: Cuando el adolescente pida permiso o comunique que va a una de estas macrofiestas, que la respuesta sea un rotundo NO! (por muy represivo que pueda sonar)